martes, 19 de enero de 2010

El Poder de la Fe

El Poder de la Fe

Presencié anoche una charla de Immaculée Ilibagiza, autora de “Left to Tell”, una memoria del genocidio ruandés de 1994 (en su traducción al español “Sobrevivir para Contarlo”) Su charla me dio mucho para pensar alrededor de la fe, la espiritualidad, y la creencia en Dios protector sobre nuestras horas más oscuras. Tanto así, como para preguntarse ¿Es esto y ella verdadera, o es algo imaginado?

Cuando llegué encontré a una muchedumbre completamente expectante y el auditorio de la catedral estaba repleto. Es que el acontecimiento en sí mismo era único – La charla de Immaculee era la justificación más verdadera y más convincente de perdón fundada en la fe católica que yo nunca había oído jamás'.

Esto no es para decir me abrazo al catolicismo – Yo de hecho soy un miembro de otra iglesia formal - pero su presentación era de tan gran alcance y tan bien razonada. El evento de Immaculee se abrió con una corta película documental que mostró la etapa qué se vivió en Rwanda en 1994.

La pesadilla comenzó con el asesinato del presidente de ese país en aquella primavera. Dentro de horas después, los Hutus de hecho, comenzaron a matar a los Tutsi, ciudadanos del país y también a los simpatizantes de los Tutsi. Durante un período de tres meses entre 500.000 y 1.000.000 de personas fueron asesinadas. Algunas estimaciones dicen que el 20% del minúsculo país; fueron los que asesinaron a la población en esta cruel matanza. Las víctimas por parte de Immaculee' incluía a; sus padres, hermanos, y su extensa familia de la que ella habló de su experiencia en ese tiempo inimaginable.

Immaculee se salvó porque fue escondida y protegida por un pastor local, que la ocultó por 91 días en un cuarto de baño de 3 por 4 pies junto a otras seis mujeres. Cuando salieron de este lugar donde estuvieron escondidas, las mujeres habían perdido la mitad de su peso corporal pero estaban vivas todavía, un milagro que ella atribuyó a la protección Divina. Ella explicó cómo la fe vino a ella en el cuarto de baño. Al principio, su confinamiento era simplemente incómodo, y duro de creer y aceptar. Luego se puso más incómodo. Hasta que finalmente, llegó a ser insoportable. Esto último ocurrió cuando una multitud de Hutus inició una búsqueda casa por casa para matar a todo Tutsi que aun quedara vivo. Fueron armados con granadas, machetes y lanzas.

En ese momento, ella dice, que comenzó a orar. Pero se sentía insegura – cualquier persona podría escucharla. Ella le pidió a Dios que se mostrara si es que él estaba allí presente. Mientras tanto, la multitud pasó varias horas buscando en la propiedad del pastor. Miraban a través del frente de la casa, debajo de los arbustos, en las dependencias, e incluso en la azotea. Por alguna razón - ella atribuye esto a Dios – porque se apartaron de la puerta bloqueada en la parte posterior de la casa. Ella dijo que oyó dos voces en su mente, mientras que la multitud buscaba en la casa. Uno voz dijo, " Tú no tienes ninguna opción, abre la puerta y que te atrapen. "La otra voz dijo, " Quédate tranquila, yo te protegeré." Immaculee dijo que fue tentada a abrir la puerta, y estaba aterrorizada, pero ella permanecía reservada. En esta primera búsqueda parece haber solidificado su fe en Dios protector de una manera que en su anterior educación religiosa no tenía.

Esa fe fuerte la sostuvo por tres meses en el cuarto de baño, hasta que la violencia terminara y ella salió a la luz del día para ver una aldea que era apenas reconocible - dejada en desorden con los cuerpos tirados por doquier y que eran comidos por salvajes perros.

Mientras vivió en ese cuarto oculta, ella comenzó a aprender inglés a través de la biblia, decía las palabras en su mente puesto que ella no podía decirlas en voz alta por miedo a ser descubierta. Ella se apoyó fuertemente en el libro de Job y las oraciones del Señor, pero ese fue su gran problema. La oración habla de perdón, y ella al principio no estaba lista para perdonar a nadie ni menos a los asesinos. Ella habló largamente cómo llegó al momento del perdón y se encontró capaz de aceptar la totalidad de la oración.

Dijo que el perdón le trajo una sensación de entrega y libertad. Ahora puedo entender esto. Sé que a partir de mi propia vida el perdón puede hacerte libre. Hay de hecho una buena y profunda sensación que viene del perdón y del soltar.

CarlosCorreaCoaching
CoachingEspiritual

miércoles, 13 de enero de 2010

La Espiritualidad Cristiana I

"La Espiritualidad Cristiana"

Cuando una persona nace de nuevo, ésta recibe el Espíritu Santo, el cual sella al creyente para el día de la redención (Efesios 1:13; 4:30). Jesús prometió que el Espíritu Santo nos guiaría “a toda la verdad” (Juan 16:13). Parte de la verdad a la que el Espíritu nos guía, es a tomar las cosas de Dios y aplicarlas en nuestras vidas. Cuando se hace esta aplicación, el creyente entonces toma la decisión de permitir que el Espíritu Santo lo controle. El cristianismo espiritual se basa en la medida que el creyente nacido de nuevo, permita al Espíritu Santo dirigir y controlar su vida.

Carlos Correa Coaching Espiritual

www.CarlosCorreaCoaching.com

lunes, 4 de enero de 2010

Cuánto Oramos Por Nuestra Familia?

Pablo, fue un hombre de Dios que se caracterizó por ser un intercesor de amor por sus allegados. Sus oraciones son valiosísimas y nos pueden ayudar en el desarrollo de nuestra intercesión por el cónyuge e hijos.

Pablo se dirige en sus oraciones al Dios y Padre de toda familia.

Qué bueno es poder allegarnos a Dios como el Padre de nuestra familia.

Nuestra familia no es sólo la nuestra es también la de Dios, porque él nos la ha dado como un regalo precioso y en Dios toma nombre nuestra familia.

Sobre esta base es que podemos llegar confiadamente al trono de Dios para pedir su unción, dirección y guía.

Si Dios ya ha bendecido a nuestra familia, entonces no hay nada que pueda trastornar esa bendición, sin embargo, satanás no se da por vencido y quiere engañar a uno o a dos miembros de nuestra familia, pero Dios nos ha dado una tremenda herramienta la Intercesión... Intercesión de familia.